viernes, junio 30, 2006

Ni prisa

Iba yo caminando plácida y lentamente por una larga calle de mi ciudad, cuando una mujer morena me adelantó con la veloz energía de un vendaval, dejando ante mi curiosa mirada un inmenso festival de curvas en rítmico movimiento.

Un primer impulso me invitó a dejar la parsimonia para ajustar mi velocidad a la belleza atrayente de aquel cuerpo tan bien tapado y destapado, pero la pereza de abandonar mi placentero paseo y el encanto que pierden las personas cuando tienen prisa, me hicieron desistir de cambiar el paso.

Qué diferente hubiera sido (comencé a soñar) si aquella brasileña (a esas alturas ya la había nacionalizado como tal) hubiera caminado lentamente un par de metros delante de mí durante un buen rato, para que yo pudiera, como ahora hacía, ir forjando un bello sueño de feliz paseo. Cómo me habría gustado que se hubiera vuelto (seguí soñando) un par de veces, con aire distraído y mirada fugaz, hasta que a la tercera y deteniéndose, me hubiera dicho, "¿Es que me sigues, o qué?". Y yo le habría respondido (también soñando), "Bueno, paseaba sin rumbo fijo, pero he visto una estrella (en los sueños uno se puede permitir ser cursi) y no me quedó más remedio que seguirla".

Entre tanta ensoñación, aquel cuerpo vertiginoso casi se había perdido en el fondo de la calle y sólo era divisable por el revuelo que levantaba. Me gustaba más así, lejana en su prisa y cercana en mi sueño.

Menuda cara de bobo debía tener yo, cuando unos enormes ojos de color por inventar detuvieron mi avance y me dijeron: "Perdona, no he podido evitar observarte tan tranquilo al caminar, ¿tienes fuego?".

"No, no tengo", le respondí, "ni prisa".

jueves, junio 29, 2006

Ambición

Como sólo vemos la parte de los otros que comprendemos, en realidad no los vemos.

¡Contadme lo que soñáis y yo no comprendo, lo que veis en la otra dirección!

miércoles, junio 28, 2006

En el estómago

Vomité toda la cena. Unos dijeron que había cogido frío en el estómago, otros que comía muy deprisa y alguno aventuró la posibilidad de un virus. Pero yo ocultaba la verdadera razón.

Hace tiempo que mi pasado y mi futuro libran una singular batalla en mi cerebro, sin conseguir avances hacia la paz. Por eso han decidido trasladar el campo de operaciones a mi estómago, para ver si lo que no consiguió el "racional" Nacho, lo alcanza el Nacho "animal".

Espero éxitos inmediatos. (O me moriré).

lunes, junio 26, 2006

Buen provecho






Nuestra capacidad de soñar convierte la cruda realidad en guiso.

viernes, junio 23, 2006

Líneas

Yo tampoco veo las líneas, Tío Paco*. Y no es que quiera pintar lo que veo. Me conformo con vivir.

Es posible que alguna vez las viera por el empeño ajeno, por el afán de otros en mostrármelas. Pero ya no.

Ni siquiera puedo ver la del horizonte.


*Francisco de Goya

miércoles, junio 21, 2006

Metabolismo

Padezco un proceso fisiológico por el que mi cerebro cristaliza las emociones.

Me receto, para combatirlo, un disolvente compuesto de sueños e inteligencia a partes iguales.

Poco a poco, el remedio convierte los cristales en un sudor pegajoso parecido a la ternura.

Libre de piedras, mi cabeza se vuelve a girar a la primera tentación que pasa.

lunes, junio 19, 2006

Sentado en el muelle de la bahía

Después de un rato mirando al mar, intentando descubrir la borrosa silueta de los que se acercan al puerto, aprendí que los barcos no transitan, aparecen.

Más tarde, comprendería también que las nubes no caminan, se forman. Que las novelas no se escriben, se paren. Que el tiempo no transcurre, se sueña.

Mirando el Mediterráneo desde Grecia, se intuye que al otro lado está España. Mirando la vida desde España, se intuye que al otro lado estás tú.

Al permanecer sentado, uno también se aleja y se acerca. Correr en una dirección es sólo correr en una dirección. Nada más.

viernes, junio 16, 2006

Viajar

Cuando viajo, mi cuerpo y mi alma tienden a separarse.
Ella le dice: - Anda, ve tú por delante que enseguida te alcanzo.
Pero cuando él ya está de vuelta, ella aún no se ha movido.
- No sé que voy a hacer contigo, se queja él, ¡eres tan remolona!.
- Si hubieras aguantado un día más, replica el alma, habría ido.
- No importa, concluye el cuerpo, yo también tenía ganas de volver.

jueves, junio 15, 2006

Seres queridos



Algunos seres queridos me incitan a que escriba aquí mi relación con los sueños, mi relación con la vida.


Esos seres queridos son:
los poemas,
los recuerdos,
los desiertos,
los humanos,
el viento
y los atardeceres.


O, mejor dicho:
lo que callan los versos,
el paraíso renacido de la memoria,
la verdad desértica,
la sonrisa,
el desinteresado zarandeo del Cierzo
y la luz inaudita de estos atardeceres.

lunes, junio 12, 2006

Diccionario para soñar: realidad

REALIDAD: Existencia real y efectiva de algo; verdad, lo que ocurre verdaderamente; lo que es efectivo o tiene valor práctico, en contraposición con lo fantástico e ilusorio.

¡Realidad, realidad, no me abandones
para soñar mejor el hondo sueño!
Jorge Guillén

viernes, junio 09, 2006

No molestar

Venía caminando con la mano en el móvil, el móvil en la oreja y la sonrisa abierta. Eran las 13.30 y el sol calentaba a conciencia la calle. Seguramente se llamaba Pilar y escuchaba la voz de alguien querido.

Lo que oía por aquel aparato, mezclado con sus sueños, su aceptable estado de salud, cierta sensación de realidad y una buena base de recuerdos y olvidos, nos había convertido en decorado.

Una sencilla mezcla expuesta al sol había sido suficiente. La receta de la felicidad estaba funcionando y nadie quiso abandonar su papel de farola.


miércoles, junio 07, 2006

Errando

"... de sueño a sueño y rima a rima he errado,
en charla incoherente con una imagen de aire:
vagos recuerdos, recuerdos nada más."

W.B.Yeats

martes, junio 06, 2006

Para soñar soñar

Para quien sabe engañarse, el tiempo es un aliado.
Para quien no sabe, es un tormento.
Para quien cree vivir, la distancia entre si mismo y la vida es infinita e irrelevante.
Para quien quiere vivir, esa distancia es inapreciable e insalvable.

jueves, junio 01, 2006

Impostura

Hay un tipo llamado Nacho que me suplanta para escribir en este blog. O, tal vez, es un grupo de personas, un colectivo llamado Nacho, que se confabulan en mi ausencia, me roban las claves y vuelcan sus ocurrencias aquí.

Durante un tiempo, me metía a la cama vestido de Sherlock Holmes para desenmascarar al impostor en alguno de mis sueños, pero no lo conseguí.

Hoy he empezado a releer desde el primer post para trazar un perfil psicológico del autor y así poder detectar si pertenece a mi entorno.

Leo que el titular del primer post decía: La vida es el día siguiente a un sueño, y creo reconocer quien pudo haberlo escrito. Alguien que ya murió.